miércoles, 27 de enero de 2016

CONTEXTO POLÍTICO Por Efraín Flores Iglesias Irregularidades en la SSA: cuento de nunca acabar

La corrupción e impunidad parecen no tener fin en la Secretaría de Salud (SSA) estatal. Gobiernos van y gobiernos vienen, y nada. Hasta el momento ningún funcionario de esa dependencia ha pisado la cárcel.
Ojalá el gobernador Héctor Astudillo Flores ponga orden y no le tiemble la mano para que aquellos funcionarios de la SSA que cometieron o cometan irregularidades sean llamados a cuentas.
Esto lo digo porque algunos funcionarios han realizado compras apócrifas, que es precisamente lo que ha provocado el quebranto financiero que ahora padece la SSA.
Fuentes de esa dependencia revelaron que algunos funcionarios del gobierno de Rogelio Ortega Martínez compraron medicamento a un precio fuera de la norma nacional, pago de anticipos de manera irregular en prestaciones de servicio y materiales que nunca ingresaron a los almacenes de la institución. Y eso ya lo detectó la ASF.
En efecto. El gobierno orteguista se caracterizó en manejar con opacidad los recursos públicos.
Algunos de los funcionarios que sobresalen por cometer irregularidades en esa dependencia son Luis Enrique Herrera Pérez, subsecretario de Finanzas; Cristal Alondra Pérez Sánchez, directora de Recursos Materiales; Teresa Alarcón Flores, enlace del Seguro Popular, y el entonces responsable del Seguro Popular, Javier Eduardo Figueroa Zúñiga.
Los denunciantes –de los cuales se omiten sus nombres por temor a represalias– refieren que Teresa Alarcón Flores tiene demandada a la Secretaría de Salud desde el año 2007 por un supuesto incumplimiento del Contrato Individual del Trabajo. Y de acuerdo a un reporte de la Contraloría General del Estado, de fecha 8 de septiembre de 2015, le impide ostentar cualquier cargo, ya que su proceso laboral sigue en curso. Pero la susodicha sigue laborando en el Seguro Popular. ¿Quién la protegerá?
Pero eso no es todo, los aludidos autorizaron otorgar a la empresa ARUTEC S.A. de C.V. un anticipo de 18, 290, 245.50 pesos por concepto de prestación de servicios anestesiológicos externos a los hospitales de la Secretaría de Salud en todo el estado, sin que este se requiriera en cada uno de ellos. Pero resulta que la empresa presentó documentación falsa, en la que supuestamente los administradores de los hospitales autorizaron  ese servicio y que fuera descontado de sus partidas presupuestales. ¡Zas!
Y que para el pago a la empresa ARUTEC S.A. de C.V., el subsecretario de Finanzas de la SSA, Luis Enrique Herrera Pérez contó con la aprobación de la enlace del Seguro Popular y el responsable del Seguro Popular, Teresa Alarcón Flores y Javier Eduardo Figueroa Zúñiga, respectivamente. El pago a la empresa se llevó a cabo el 4 de mayo de 2015, con cargo al Seguro Popular del ejercicio fiscal 2014.
Los funcionarios se confiaron. No contaban que los directores de los hospitales se iban  dar cuenta de esa irregularidad, y para eso enviaron oficios a sus superiores para informar que nunca firmaron la autorización para el pago de la empresa por el servicio señalado, por lo que las firmas eran apócrifas.
La misma fuente indica que los mismos funcionarios dieron un anticipo por 35 millones de pesos a la empresa MIMOMO S.A. de C.V., por concepto de la compra de medicamento, el cual nunca llegó a ningún almacén. “No hay reporte alguno de su ingreso a ningún almacén de la Secretaría de Salud ni mucho menos que se hayan distribuido en los hospitales”.
Este tipo de personas no deben de seguir en la Secretaría de Salud ni en ninguna otra dependencia gubernamental. Ojalá el titular de la SSA, Carlos de la Peña Pintos, no permita más abusos ni actos de corrupción. Lo más correcto es solicitar una investigación más rigurosa y pedirle a la ASF que proporcione los documentos que señalan la participación de funcionarios en actos deshonestos.
Por cierto, los denunciantes también señalan que en la Subdirección de Recursos Materiales de la SSA se encuentra laborando actualmente un primo de Cristal Alondra Pérez, de nombre Alfonso Pérez Sánchez, quien supuestamente cobra desde el 15 hasta el 20 por ciento de comisiones a los proveedores de contrato asignado.
Es urgente y necesario que el gobernador Héctor Astudillo frene ese tipo de anomalías en la SSA y en otras áreas del gobierno del estado.
ENTRE OTRAS COSAS… En este momento tres guerrerenses destacan en las cúpulas de los institutos políticos en que militan.
Me refiero a Beatriz Mónica Morga, secretaria general del CEN del PRD; Manuel Añorve Baños, secretario de Operación Política del CEN del PRI, y Jorge Camacho Peñaloza, secretario de Vinculación del CEN del PAN.
Los tres tienen algo en común: han sido candidatos de sus respectivos partidos a la Gubernatura de Guerrero, y siguen moviéndose desde sus trincheras para encontrarse en la elección de 2021. Veremos quién de ellos llega fortalecidos para suceder en el cargo a Héctor Astudillo. Falta mucho, pero es válido que se muevan desde ahora.

Comentarios: 
E-mail:efrain_flores_iglesias@hotmail.com; 
Facebook: Efraín Flores Iglesias; 
Twitter: @efiglesias