miércoles, 25 de enero de 2012

TERCERA VÍA. PRIÍSTAS. NADA DE "BULLING" Ernesto Rivera Rodríguez



Los aspirantes priístas a la alcaldía de Acapulco,  consistieron en firmar una minuta en donde prometieron  comportarse como “buenos muchachos”, como adultos que dicen que son y no rayar el cuaderno ajeno, ni pintarrajear en las paredes de las colonias de  los adversarios y mucho menos pero mucho menos  nada de “bulling”.
Respeto, admiración, teatro guiñol o lo que se le parezca,  los precandidatos priístas menos uno que no estuvo de acuerdo a firmar tan educado protocolo, fueron todo sonrisa, encanto puro, dulzura, derramaban melcocha de la buena,  y salieron si no tomados de  la mano, si dispuestos cada uno desde su más profundo fuero, ahí donde rigen los monstruos del ser humano a darle con todo a  los demás, pues lo que esta en juego no es la reina de las flores, o qué no son tiempos de guerra, o para que son los tambores que se oyen  desde el Fuerte de San Diego.
César Flores Maldonado es a todas luces el político y aspirante más experimentado, con un profundo sentido de la política de los tres niveles de gobierno, su experiencia no es sólo cuantitativa, sino que ha sido muy útil en verdaderos tiempos de crisis de la política estatal , como lo fue el caso de “Aguas Blancas”, en donde como diputado local jugo un papel preponderante para que el barco de la administración figueroista lograra llegar a mejor puerto, mantener a flote las instituciones políticas,  sufragar los yerros y admitir los errores.  Pero mucho antes que eso como director general de transportes en el Estado, el transporte de Acapulco, le debe técnicamente su primera y fundamental restructuración, la separación en bloques de las rutas urbanas que aún existen y que son fundamentales para el transporte urbano de la ciudad  y puerto.
Con maestría y doctorado, sin olvidar que fue líder de la Federación de Estudiantes de la UAG, conjuntamente con Ramón Almonte Borja, y el extinto Armando Chavarría Barrera, en los tiempos en que Héctor Vicario Castrejon, y David Jiménez Rumbo, cada quien por su rumbo jugaban a las canicas,  si es que lo hicieron  a sido además representante popular federal en el Congreso de la Unión, con profundo sentido de la negociación y el cabildeo, César es un profesional, un hombre con carisma humor, en pocas palabras en un “Ave de Tempestades”, con el sello de la casa de Huitzuco.
Alejandro Carabias Icaza, de familias de renombre político e intelectuales, con gran amistad con el ex presidente Ernesto Zedillo, cofundador del Partido Verde Ecologista en Guerrero, desde sus diferentes puestos de elección popular,  regidor de la Comuna de Acapulco, diputado local, y actualmente diputado federal renuncio al Verde para ponerse la camiseta del Tricolor, es un reconocido promotor de la defensa de los recursos ambientales, en toda su extensión, así como un vehemente luchador de la defensa de los grupos ecologistas, grupos estos en verdadera crisis existencial dada la violencia institucional  y de facto que se ha abatido sobre ellos por las poderosas redes de las mafias explotaras hasta lo irracional de los recursos naturales y n renovables y la fauna en peligro de extinción.
Ericka Lurhs Cortés, fiel a su jefe “nato”, de toda la vida, que podría hacer sin él, nada más que seguirle los pasos a falta de luz  propia, con más de veinte años como militante priísta siempre al servicio y al lado del actual presidente municipal acapulqueño que va de salida, le ha sido útil para los más grandes servicios y causas  políticas a su favor, como delegada de Copladeg en Acapulco, le sirvió de “raund” de sombra para arribar como diputada local, y posteriormente, esperar para en el 2008, arribar junto con su amigo y jefe Manuel Añorve Baños a la presidencia municipal de Acapulco, con la responsabilidad de la Secretaría de Desarrollo Social. De ahí lanzarse a la aventura descabellada en búsqueda de la gubernatura del estado, con los resultados de todos conocidos, con una perdida total de la credibilidad no solamente política, a últimas fechas a sido exhibida por Rubén Figueroa Stmuny, como corresponsable de la debacle financiera y política del H. Ayuntamiento de Acapulco, en un “affaire” que ha asegurado el propio “cachorro” figueroista tiene continuación.
Marco Antonio Terán Porcayo, el penúltimo en subirse al “Tren de las 3:10 a Yuma”, ha puesto en claro el convertir el dicho popular de que “caballo que alcanza gana”, hombre a quien no hace fuerte su militancia política priista , que data de hace menos de 10 años, pero que trae consigo, la grandísima misión y  tarea realizada de haberle dado la oportunidad, o si lo quieren ver “eufemísticamente” o leer, la segunda oportunidad de vida a cerca de  doscientos mil pacientes de cáncer, generándoles una mejor vida, que gracia a su talento capacidad y entrega y del gran equipo de investigadores, profesionales médicos, cirujanos, bajo su dirección en el transcurso de cerca de 20 años al frente del Instituto Estatal de Cancerología de Guerrero, “Alberto Beltrán Ortega”.
Veinte años fuera de los reflectores, de la parafernalia política que es tan superficial Terán Porcayo a labrado un perfil mucho más allá de lo inimaginable, por lo políticos de barrio, que se buscan en la segunda de forros, porque cuando se es protagonista del dolor humano no existe tiempo para veleidades, solo para tomar conciencia de que las cosas no pueden ni deben seguir iguales. Cuestión de conciencia social, y por que no de lucha de clases. Este es hoy el cruce de caminos de Terán Porcayo, Hoy también fuertemente presionado, porque nunca falta una piedra en el zapato, nunca falta quien pretenda “cantinflear” con el profesioalismo que lo ha encumbrado como hombre ciencia, como médico cirujano, como un hombre cercano al dolor humano, a las grandes carencias de los guerrenses, y ofrecer desde su postura profesional hasta donde la ciencia lo permite que es muy amplia y los recursos financieros lo contrario una segunda oportunidad, y hoy el mismo Marco Antonio Terán Porcayo, ha tomado esto para si mismo y para y desde otros  planos políticos, desde los de la contienda electoral, luchar por la alcaldía de Acapulco.
Protegido desde sus estudios preparatorios universitarios y bajo la sombra y el embrujo político del hombre fuerte de Guerrero, Rubén Figueroa Alcocer,  Fermín Gerardo Alvarado Arroyo, aprendió en poco más de un cuarto de siglo a ser un riguroso militante prisita, obediente, callado, disciplinado,  devoto y fue ascendiendo en la “nomeklatura priísta” pasado a paso cual celador de condominio, pero con un tesón cargado a la obstinación de jamás volver los ojos atrás. Director del Colegio de Bachilleres No1, en Chilpancingo, presidente del Instituto de Capacitación Política del CEN del PRI, posteriormente Director General del mismo, con René Juárez Cisneros, como gobernador; secretario general de Gobierno, en el interinato de Ángel Aguirre Rivero, secretario de Educación, director de Capama, en ese mismo trieno, comenzó, igualmente a sentir el suculento sabor, más que sensual del goce y disfrute del poder, cual afrodisiaco espécimen que todo lo dobla y del cual hasta hoy no parecer haber salido, sigue trotando por esos caminos, y así paso como diputado en el Congreso Local, fue formula con Manuel Añorve y Rodolfo Escobar Ávila, como Síndico de Finanzas, a la alcaldía de Acapulco, pero por esos retruécanos del destino que no alcanzamos a entender,  regreso por un “pedazo de hueso” que le costo tan caro que se dio con la frente en el polvo, para ser rescatado de nuevo por su viejo patrón político y llevarlo con un escaño al Congreso de la Unión, que actualmente ocupa. Su delirante obsesión por el poder, lo ha llevado a perder el piso severamente por lo cual ha sido señalado fuertemente no sólo por la comunidad política sino por la ciudadanía en general, pero es innegable el trabajo que actualmente realiza y a entregado a los acapulqueños.
Estuvo a punto de irse a  los “Pinos” si su compadre Roberto Madrazo, hubiera ganado la presidencia de la República, en los momentos que era Director General de Invisur de Guerrero, en la administración renejuarista, Efraín Flores Maldonado, hombre  intelectual, excelente orador, académico, asesor de decenas de políticos, su mejor función es la de actuar como mediador, consejero, dadas sus personales habilidades para la diplomacia, amigo de  sirios y troyanos, puede ser el “Condocet” del próximo inquilino del Palacio del Parque Papagayo, pero hasta ahí. Email:gernestorivera@gmail.com